Durante octubre Valeria Payán, responsable de proyectos en SIC4Change, llevó a cabo una serie de talleres que conforman el proyecto “Cambia el cuento: Nuevas voces migrantes” con el alumnado de 4o ESO del IES PTMC.
La iniciativa es financiada por el Gobierno de Canarias y consiste en el desarrollo de encuentros participativos donde juventud de institutos locales exploran temas como
"El objetivo es que quienes participen en el taller sean conscientes de los sesgos de
discriminación por motivos de raza (xenofobia) o por carencia de recursos económicos
(aporofobia), para que podamos cambiar el pensamiento y actuar en consecuencia a favor de la tolerancia, la solidaridad, la colaboración y la hospitalidad", han anotado estudiantes en una entrevista publicada en el periódico del centro.
Acá la publicación completa:
Hola, Valeria. ¿Qué esperas conseguir con el taller que has llevado a cabo en el centro?
-Hola. Nuestra intención es que el alumnado tome conciencia de la diversidad
cultural que impregna nuestra sociedad actual, y que vea la riqueza que esto encierra. La vida comenzó con la migración de la humanidad primitiva en busca de alimento. Con el proyecto “Cambia el cuento: Nuevas voces migrantes” también intentamos que el alumnado se vea así mismo a través de otros testimonios y vivencias de jóvenes de su misma edad.
¿Qué respuestas te han llamado más la atención de las obtenidas del alumnado de los centros?
- En líneas generales, sabemos que proyectos de estas características son como gotas
de agua en el mar, aunque gracias a estas acciones puntuales, se puede ofrecer a la
población adolescente un nuevo enfoque desde el que observar la realidad. Me refiero a las “nuevas narrativas”.
Desafortunadamente, en relación a las personas migrantes, existe un discurso hegemónico vinculado al odio, la amenaza y la invasión, y las personas jóvenes son bastante susceptibles a la influencia de los agentes socializadores, como la
familia, las amistades, los medios de comunicación y las redes sociales. Esto puede llevar a que sean más propensas a creer y repetir información sin haberla contrastado antes.
¿Cómo llegaste a trabajar con la organización Sic4Change?
- Durante varios años trabajé en centros de ayuda humanitaria y acogida integral de
personas migrantes, gestionados por otra organización internacional. En un momento
dado, busqué otras opciones que permitieran desarrollarme intelectualmente y acercarme a la educación porque es una poderosa herramienta de transformación social.
Desde el curso académico anterior coordino los proyectos vinculados a “Nuevas narrativas” en SIC4Change. El año pasado participaron más de 330 alumnos y alumnas de 7 institutos diferentes. Este curso, el proyecto está financiado por el Gobierno de Canarias y se prevé duplicar la participación, y además, nos acercaremos a los centros educativos de zonas rurales.
Valeria Payán, Responsable de proyectos en SIC4Change en uno de los talleres del proyecto "Cambia el cuento: Nuevas voces migrantes” en octubre 2023.
¿Cómo definirías la organización SIC4Change para quienes no sepan nada?
- La filosofía fundacional de SIC4Change es sumar talento, aunar esfuerzos y crear
soluciones de forma participativa. Por eso somos un “clúster”: juntamos personas
con vocación de transformar el mundo; y, sobre todo, porque creemos en el potencial
de la colaboración para hacer frente a las problemáticas sociales a las que se enfrenta
nuestra sociedad actual.
Utilizamos la innovación social para entender los problemas y generar un entendimiento común, buscar y co-crear soluciones conjuntas, experimentar estas soluciones para validar que son correctas y posteriormente, hacerlas llegar al mayor número de personas posibles.
¿Qué ha motivado que te dediques a la formación en los centros educativos?
- Por una parte me siento muy cómoda en ambientes educativos, creo que somos
eternas estudiantes/aprendices. Por otro lado, creo que trabajar a través de proyectos en centros educativos y acercar al alumnado contenidos teóricos o realidades sociales que forma parte del currículo oculto de los profesionales que nos dedicamos a este trabajo, pero que es fundamental para crear una sociedad activa, crítica y responsable
socialmente.
¿Qué has aprendido de esta experiencia con nuestro alumnado?
- Tras impartir el taller, reafirmé la necesidad que existe en los centros educativos de abordar temáticas como el racismo, la discriminación y la aporofobia. En la mayoría de ocasiones el alumnado no es consciente de la proximidad de esta realidad a nuestra vida diaria, tanto fuera como dentro del instituto. Aún queda mucho trabajo por delante.
¿Qué crees que ha aprendido nuestro alumnado del taller que has impartido este mes?
- Para ser realista, el tiempo que se ha dedicado en este taller, no puede dar como
resultado un cambio en la conducta ni en la manera de enfocar una realidad; pero sí
espero que haya calado el pensamiento de que somos más de lo que nuestra apariencia
dice, y lo que le pasa a otra persona, me afecta también a mí.
¿Qué te gustaría que hiciera el alumnado como proyecto final?
- Me gustaría que fueran conscientes que el arte es una potentísima herramienta de
transformación social y que, en este caso, la música nos une. En cuanto al producto final, co-creado con la ayuda del músico chileno Agustín Lapertosa, quisiera que les haga sentirse parte de un todo, que “son porque somos” y que sean conscientes que ellos y ellas son jóvenes agentes de cambio, y que su voz, ritmos, melodías y mensajes
vinculados a nuevas narrativas tien el poder de traspasar las aulas y llegar a la sociedad
en su conjunto.
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